Se ha publicado el nuevo informe “Science, Research and Innovation in Europe, 2020”, un extenso documento que analiza en profundidad el estado de las cadenas de valor del conocimiento y la tecnología en Europa, en un momento en que éstas se van a situar indiscutiblemente en el centro de la prosperidad, la seguridad y la competitividad global en la era post-Covid.
Hace unos días, con motivo de la crisis de Nissan, escribí un hilo en Twitter que se volvió viral en las redes (154.000 impresiones hasta el momento). Lo reproduzco aquí:
(1) Siento una enorme tristeza por el anuncio del cierre de las plantas de Nissan en Barcelona. Con esos empleos se van muchas ilusiones, se truncan vidas y se desvanece parte de nuestra esperanza y nuestro futuro.
(2) La marcha responde a razones de reordenación estratégica de las operaciones de la compañía, debidas seguramente a su relación con Renault y al peso de ésta en Europa
Según los análisis del EUSTAT, sólo el 25,7%% de las empresas con innovación tecnológica reciben financiación pública.
Las Administraciones Públicas son cada vez más exigentes y sus programas constituyen instrumentos sofisticados que precisan de un conocimiento experto en la materia.
Por ello, en ocasiones, las empresas no logran un retorno adecuado de los esfuerzos realizados para presentarse a estos programas.
El Instituto de Investigaciones Económicas (IVIE), en su nuevo informe Covid-19 elaborado por Javier Quesada, Matilde Mas y Jimena Salamanca, considera que la I+D ha de ganar peso en la actividad productiva de los diferentes sectores de la economía, tanto mediante la incorporación de contenido innovador en los bienes y servicios producidos por las empresas, como desarrollando nuevos sectores más tecnológicos.
En el reciente ránking Bloomberg de innovación, España cae tres posiciones, hasta la 33. Otro año descendiendo. 10 puestos perdidos en 5 años. Nos superan ya Hungría, Polonia, Grecia, Rumanía y Malasia. Alarma roja. El baremo mide un conjunto de indicadores compuestos, como la producción científica, el número de patentes, la productividad o el peso de los sectores de alta tecnología.
La Confederación de Sociedades Científicas de España ha publicado el Informe COSCE-DECIDES 2019, de seguimiento y análisis de las políticas científicas anunciadas y ejecutadas por el Gobierno.
En este informe se resume la preocupante situación en la que se encuentra el Sistema Español de Ciencia, Tecnología e Innovación. El apartado 2, relativo a la financiación refiere textualmente…
España ha vuelto a suspender en innovación tecnológica. La inversión del Estado en i+D+i fue de 14.900 millones de euros en el 2018, según los últimos datos disponibles en el INE. Esta cifra supone un incremento del 6,3% respecto al año anterior y un aumento por segundo año consecutivo. En Catalunya la inversión creció un 7,2%, al llegar a los 2.513 millones de euros y alcanzar el 23,5% del total español.
Este mes de noviembre, la Dirección General de Asuntos Económicos y Financieros de la Comisión Europea ha remitido una nota técnica al Eurogrupo titulada Inversión en la euroárea: poniendo foco en la investigación y la innovación. Reproduzco literalmente uno de sus párrafos:
Ayer se dieron a conocer los contenidos del preacuerdo alcanzado entre el PSOE y Unidas Podemos para conformar un Gobierno progresista de coalición. Entre los contenidos, destacamos el apartado 2.8.- Compromiso de Estado con la Ciencia y la Inversión en I+D+i, que incorpora el punto 2.8.1. que refiere textualmente “Aumentaremos la inversión pública en I+D+i civil por encima del incremento del límite de gasto no financiero del Estado y avanzaremos hacia los objetivos comunitarios de inversión total pública y privada.
Se han publicado las nuevas estadísticas de I+D en España, correspondientes al año 2018. Según el Instituto Nacional de Estadística, la economía española invirtió 14.946 M€ en I+D en 2018, el 1,24% del PIB.