La industria vasca continúa creciendo pese a la desaceleración de la economía y la incertidumbre que genera la guerra comercial. Lo hace además a mayor ritmo que el conjunto del Estado y, de hecho, está a la cabeza de las comunidades con mayor perfil manufacturero. El Índice de Producción Industrial de Euskadi experimentó en octubre un aumento del 5,1% respecto al mismo mes de 2018, muy por encima de la media del Estado que fue del 1,1%.
El Gobierno de Japón aprobó este jueves su primer paquete de estímulo económico en tres años, de 26 billones de yenes (215.000 millones de euros), para estimular el crecimiento de su economía y mejorar infraestructuras ante desastres naturales.
El Banco de España informa sobre un repunte de empresas que no son capaces de generar beneficios suficientes para afrontar los gastos financieros. Este tipo de compañías son un lastre para la economía y pueden agravar aún más coyuntura económica. El supervisor alerta de una caída generalizada de los beneficios y de la rentabilidad corporativa.
Las políticas monetarias ultra-expansivas de los principales bancos centrales del mundo no logran reactivar la economía. Así lo avalan las últimas previsiones de la OCDE, que apuntan a un retroceso acusado del crecimiento en casi todas las economías avanzadas. Destaca el frenazo de la zona euro, con un crecimiento esperado apenas superior al 1% anual durante el bienio 2019-2020, sin que se perciba una reacción a las potentes dosis de estímulos monetarios que se vienen inyectando desde el año pasado.
El Banco Central Europeo (BCE) ha disparado con toda su artillería para intentar reactivar la economía: más de 2,6 billones de euros de deuda comprada, tipos negativos que obligan a pagar por prestar y la promesa de que seguirán así tiempo. Y ni por esas. La política monetaria no consigue hacer despegar con fuerza el crecimiento.
Uno de los aspectos más comentados de las cifras revisadas de la contabilidad nacional ha sido el descubrimiento de que el consumo de los hogares estaba perdiendo dinamismo a una velocidad superior a lo que creíamos. Así, en 2018 su crecimiento fue del 1,8%, el lugar del 2,3% que apuntaban los cálculos iniciales, mientras que la tasa de ahorro se elevó hasta el 5,9%, en lugar de descender hasta el 4,9%.
La directora gerente del FMI se ha estrenado en el cargo lanzando un toque de atención acerca de los riesgos para la economía mundial de la escalada proteccionista. Según las estimaciones del Fondo, la guerra comercial haría perder nada menos que 700.000 millones de dólares a la economía mundial en 2020, cerca de la mitad de lo que produce cada año la economía española.
Las expresiones lingüísticas que surgen ante la desazón que generan los datos y acontecimientos económicos tienen un valor más allá de su intención de describir hechos. Generan expectativas y reacciones que retroalimentan la congoja. Es difícil establecer el límite entre las advertencias responsables y el catastrofismo. Considero, no obstante, que está primando demasiado frecuentemente la sobrerreacción y está generando, por sí sola, una externalidad negativa en la economía.
Algunos de los riesgos a que se enfrentaba la economía española se están materializando, causando un deterioro adicional de la coyuntura. Estos últimos días la atención se ha centrado en los aranceles impuestos por la administración Trump a los productos europeos, y que afectan sobremanera a nuestras empresas. Las restricciones se aplican a cerca de 1.000 millones de euros de exportaciones españolas, en torno al 14% del total europeo, es decir proporcionalmente más que el peso de España en la UE.