Ante el histórico y pésimo dato que hemos visto en el segundo trimestre de la contracción económica 18,5% que ha vivido de la economía española, se está tratando de justificar este dato argumentando que Estados Unidos está peor o que se debía al elevado peso del turismo sobre el PIB.
Los procesos concursales continuaron cayendo con fuerza durante el segundo trimestre de 2020, más incluso que el primero, pero este dato podría no ser del todo realista. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística (INE), entre el 1 de abril y el 30 de junio, el número de deudores en concurso cayó un 41% respecto a 2019.
La economía española está atravesando uno de sus momentos más difíciles. Tras la contracción del 18,5% en el segundo trimestre, el valor de los bienes y servicios que se producen en el país retrocede hasta niveles registrados en 2002, anteriores al inicio de la burbuja inmobiliaria.
La caída en el segundo trimestre de este año, periodo en el que sufrimos el confinamiento para tratar de parar la expansión de la COVID-19, ha sido muy muy significativa en todas las economías, como se esperaba.
El índice PMI final del sector manufacturero de la zona euro registra 51,8 en julio frente a las estimaciones de los analistas que rondaban los 51,1 puntos respecto a los 47,4 de junio, con lo que se sitúa por encima de lo esperado y supera la barrera de los 50 puntos que dividen la contracción del crecimiento gracias al aumento de la producción y los nuevos pedidos, aunque persiste la destrucción de empleo. En España, el índice sube a los 53,5, máximos de 27 meses.
El confinamiento y la paralización de la actividad productiva para contener el covid-19 y la crisis que está desencadenando han llevado a las empresas del Ibex-35 a cerrar el peor trimestre de su historia, con pérdidas inéditas que superaron los 14.000 millones de euros, de las que prácticamente el 80% fueron del Santander.
Un país de extremos, una economía con fuertes desequilibrios y dependiente como ninguna otra del turismo exterior, una crisis sanitaria especialmente virulenta... Ninguna gran economía europea crecía tanto como España en los años posteriores a la Gran Recesión y ninguna ha hincado ahora tanto la rodilla como la española.
El índice de producción industrial registró en mayo un incremento mensual del 14,7% (según los datos corregidos de estacionalidad y calendario que ofrece el INE). Pero este no debe ser el titular puesto que se está comparando con abril, cuando se paralizó la economía para minimizar la movilidad y ser más efectivos en la lucha contra el Covid-19. Por supuesto, el cambio de tendencia es muy relevante e indica que la industria ya ha tocado fondo, pero la producción industrial en mayo de 2020 todavía era un 24,5% inferior a la de mayo de 2019.
ArcelorMittal, la mayor compañía siderúrgica mundial, registró pérdidas de 1.679 millones de dólares (1.427 millones de euros) en los seis primeros meses de 2020, frente al resultado negativo de 33 millones de dólares (28 millones de euros) contabilizado en el primer semestre de 2019, según ha anunciado la multinacional.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de ArcelorMittal entre enero y junio alcanzó los 1.674 millones de dólares (1.423 millones de euros), un 47,8% por debajo del dato correspondiente al primer semestre del año pasado.
El producto interior bruto (PIB) de Francia sufrió un desplome del 13,8% en el segundo trimestre del año, la mayor caída de toda la serie histórica, como consecuencia del impacto del cierre de las actividades no esenciales entre los meses de abril y junio por la Covid-19