El Consejo de Ministros ultima la aprobación de un nuevo Perte destinado a la economía circular. La intención del Ejecutivo es aprobarlo a mediados de este mes de enero y otorgarle una visión amplia que incorpore a distintos sectores como el eléctrico, la alimentación o la distribución para impulsar el reciclaje y la reutilización.
La prolongación de la espera para las primeras convocatorias de los grandes proyectos estrátegicos (PERTE) que canalizan la llegada de los fondos europeos a las iniciativas más transformadoras y de mayor calado con la participación de varias empresas está empezando a cambiar la sensación de preocupación en el Gobierno vasco por la de enfado.
España ha recibido dos buenas noticias en los últimos 10 días. Por un lado, las autoridades comunitarias han avalado el primer desembolso de los fondos europeos por importe de 10.000 millones, tras dar por bueno el cumplimiento de los primeros 52 hitos o compromisos incluidos en el Plan de Recuperación y Resiliencia.
El Ejecutivo ha pulsado el acelerados para tratar de autorizar en lo que resta de año la totalidad o cerca del total de 24.198 millones de fondos europeos del Mecanismo de Recuperación de la Comisión Europea presupuestados este 2021 para poder ejecutarlos en 2022 al asumir que no le dará tiempo a implementar ni la mitad de lo previsto. Se trata de casi 6.500 millones pendientes de autorización.
El BOE ha publicado las bases reguladoras para la concesión de subvenciones para la financiación de proyectos innovadores para la transformación territorial y la lucha contra la despoblación.
El objeto de la orden es el establecimiento de las bases reguladoras para la financiación de proyectos innovadores para la transformación territorial, que desde una dimensión económica, social, medioambiental y de género propicien la reactivación social y económica de zonas con problemas de despoblación y revaloricen el espacio rural.
Millones de euros en fondos europeos y en prestaciones contra la crisis desatada por la pandemia están quedándose sin ejecutar por las complicaciones en la tramitación, las trabas administrativas y otros obstáculos a la gestión, según las cifras de organizaciones tan diversas como el centro de análisis Funcas -de la patronal financiera CECA-, la organización de autónomos UPTA, la Asociación Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales (AEDGSS) o la alianza de ONG contra la pobreza European Anti Poverty Network (EAPN).
La Comisión Europea ha aprobado este viernes el desembolso a España del primer tramo del fondo de recuperación, que asciende a 10.000 millones de euros, según ha anunciado la presidenta de la institución, Ursula von der Leyen.
Los meses pasan y la parte de los fondos en la que Euskadi había depositado más esperanzas, la que se refiere a grandes "proyectos transformadores" de la economía en los que participan empresas y la que acoge a las iniciativas de más relumbrón, sigue muy atascada. Una situación que ha elevado los niveles de alarma del Gobierno vasco por el problema que puede empezar a generarse para cumplir los plazos fijados por la UE.