La UE encara la recta final del 2024, con bastante trabajo por hacer en el plan de salida de la pandemia. De los 723.800 millones de euros que componen la dotación total del plan de Recuperación y Resiliencia, se ha desembolsado un 42% de la financiación. Los países comunitarios deberán ponerse las pilas si quieren avanzar en el desempeño del plan y acceder a la totalidad de la financiación asignada antes de culminar el plazo de agosto de 2026.
El final del verano marca el inicio de un nuevo curso político que aboca al Gobierno a ponerse las pilas para cumplir con Bruselas. La dilatación de los plazos del Plan de Recuperación pone a España en una difícil tesitura, no solo por sacar adelante una intrincada reforma fiscal, sino por cumplir con un calendario que acumula meses de retraso. El Gobierno de Sánchez deberá apurar los tiempos para pedir, antes de cierre de año, el quinto y sexto pago de fondos Next Generation que habían sido agendados para este 2024.
El Gobierno dijo en 2022 que los fondos alcanzarían «velocidad de crucero» en cuanto a su ejecución ya ese año. A finales del ejercicio se reafirmó con que ya se había alcanzado ese ritmo de despliegue de los recursos comunitarios y ahora en 2023 insisten cada vez que pueden en esa idea.
La gestión de los fondos europeos ha sufrido una ralentización en el primer semestre de este año, de tal manera que entre enero y junio de este año solo se han comprometido 7.770 millones de euros frente a los 12.858 millones del primer semestre del año pasado, según los datos recogidos por el Observatorio de la Unidad Next Generation EU de LLYC.
El Gobierno prevé tener articulada la segunda convocatoria del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC) en junio, según ha informado este viernes el ministro de Industria, Comer
Bruselas da más tiempo al gobierno de Giorgia Meloni por las dudas que tiene sobre algunas de las reformas del plan de recuperación por las que le corresponden 19.000 millones de euros del total de 192.000 millones planificados hasta 2026. La Comisión Europea ha retrasado el pago del tercer desembolso a Italia, que era el único país, junto con España, que lo había solicitado.
A 30 de noviembre de 2022, a un mes de 2023, y por tanto, la última fecha registrada, hasta ahora, por la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), el Gobierno de España solo había ejecutado el pago del 29% de los fondos Next Generation -la mayoría de ellas transferencias entre administraciones y dinero que va a parar a la inversión pública-, si bien se estima que los pagos realizados acaben entorno al 40% a finales de diciembre de este año.
El Gobierno no ha logrado cumplir su primer gran compromiso de inversión para este semestre con la Comisión Europea y pide más tiempo a Bruselas para su ejecución. Fuentes del Ministerio de Industria confirman a este diario que se precisa más tiempo para materializar el compromiso de adjudicar 1.200 millones antes del 31 de diciembre en tres de los llamados proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica (Perte). "Se está negociando en el marco de la adenda del Plan de Recuperación y deberíamos tener respuesta antes del 31 de diciembre", aseguran.