Los efectos del Brexit, aun cuando Reino Unido todavía está en la fase inicial de la negociación para consumar el divorcio, ya se notan en la economía española.
El éxodo de los trabajadores europeos en Reino Unido ha comenzado. El 25% de los empresarios británicos temen que los trabajadores comunitarios emprendan este mismo año su regreso al Viejo Continente, según una encuesta realizada por el Chartered Institute of Personnel and Development (CIPD) recogida por el Financial Times. Este porcentaje alcanza el 49% entre empresarios del sector sanitario o el 43% en educación.
España es uno de los cinco destinos que el banco americano Citi analiza para abrir una nueva base en Europa continental tras el Brexit, según ha explicado en Dublín James Cowles, director de Operaciones de Citigroup en Europa, África y Oriente Medio. Los otros destinos barajados por el banco son Irlanda, Alemania, Francia y Holanda. "Nuestro problema es que, posiblemente, se perderán los pasaportes europeos", ha añadido, en referencia a los derechos que permiten operar desde Reino Unido y dar servicio a toda Europa sin requerir la aprobación de los reguladores locales.
La economía británica crecerá un 2,4% menos, durante los cinco próximos años, como consecuencia del Brexit. Así lo ha reconocido este mediodía Philip Hammond, canciller del Exchequer desde julio, en su primera declaración de otoño, una especie de mini presupuestos en los que el Gobierno anuncia sus prioridades financieras.
Madrid empieza a adquirir carta de naturaleza como uno de los destinos potenciales más destacados de la gran banca de inversión a poco que las inclemencias del huracán Brexit terminen por forzar su destierro desde la City de Londres. La primera entidad en dar un paso que puede resultar decisivo para hacer las maletas y venirse a la capital de España es, ni más ni menos, que Citibank, uno de los líderes indiscutibles del mercado financiero global.
El Gobierno británico de Theresa May no tiene un plan concreto sobre el Brexit y trabaja en más de 500 proyectos relacionados con la salida del Reino Unido de la UE, según revela hoy un documento filtrado y publicado hoy en "The Times".
Los principales bancos británicos podrían abandonar el Reino Unido a comienzos de 2017 ante los crecientes temores a las futuras negociaciones para el 'brexit', según informa The Observer.
De acuerdo con esta información, si los grandes bancos del país se preparan ya para una posible reubicación fuera del Reino Unido durante los primeros meses del próximo año, las entidades bancarias más pequeñas están haciendo planes para marcharse antes de las navidades.
Hoy hace justo dos meses desde que los británicos decidieron en referéndum que su camino y el del resto de los europeos debía bifurcarse. De poco sirvió que antes de la votación de aquel 23 de junio, prácticamente desde todas las instituciones europeas y desde sus mayores empresas se advirtiera al pueblo británico de que su decisión, fuera cual fuera, tendría consecuencias económicas.
Los grandes bancos de inversión con sede en Londres no van a esperar a que se aclare el panorama en Reino Unido tras el Brexit y ya han comenzado a hacer planes para irse del país. El objetivo es tener todo preparado para que a las pocas semanas de que el Gobierno inicie el proceso de salida de la Unión Europea poder realizar el traslado, según fuentes de cuatro de las mayores entidades.