El auditor Deloitte ha obligado a Grifols a reformular sus cuentas de 2023 con una reducción de 17 millones en su beneficio neto y de 13 millones en su Ebitda (beneficio operativo bruto), y, lo que es más grave, una disminución de 457 millones en su patrimonio neto. Esta reformulación siembra de nuevo dudas en el mercado sobre la contabilidad de Grifols en plena revisión de sus cuentas con Brookfield de cara a una posible OPA de exclusión, y ha obligado a la CNMV a suspender la cotización del valor, mientras que sus bonos se desploman en Londres.
Los abogados de Grifols y Gotham se dan más tiempo para el caso que les enfrenta ante los tribunales en Nueva York. Las dos partes han pactado un nuevo calendario que amplía los plazos del proceso y que marca hitos hasta noviembre solo para las primeras fases del enfrentamiento, según documentos registrados ante el juzgado. El juez ha admitido la solicitud de prórroga y la ha certificado.
La multinacional de hemoderivados Grifols no se plantea llevar a cabo nuevas desinversiones tras la venta del 20 % de Shangai Raas, mientras se enfoca en la creación de flujo de caja y el control del gasto para reducir su abultada deuda y recuperar la confianza de los mercados.
El presidente ejecutivo de Grifols, Thomas Glanzmann, ha enviado una carta a los accionistas de cara a la junta que se celebrará el 14 de junio en la que defiende la actuación de la compañía ante el «ataque del fondo oportunista Gotham City Research» y que, pese a las circunstancias que considera «extraordinarias», afirma que la empresa ha progresado «enormemente».
Grifols ha anunciado la firma de una colocación privada de 1.000 millones de euros en bonos sénior garantizados al 7,5%, con vencimiento en abril de 2030, sujeta a las condiciones habituales de cierre de este tipo de operaciones. Según ha explicado la compañía de hemoderivados, los fondos obtenidos con esta transacción se utilizarán para amortizar los bonos no garantizados con vencimiento en 2025.
Han sido tres meses muy difíciles para la empresa, sus empleados y la familia Grifols”, reconoce Thomas Glanzmann, presidente ejecutivo de Grifols, tras hacer balance del terremoto que ha vivido la empresa con los tres ataques que ha sufrido por parte del fondo bajista Gotham City Research.
Después de las reclamaciones de la Comisión Nacional de los Mercados y de los Valores (CNMV) a Grifols para que ajustara sus cuentas de 2023, la compañía de hemoderivados se ha visto obligada a ejecutar importantes cambios. Ha tenido que sumar más de 1.100 millones más a su deuda financiera, lo cual le ha obligado a elevar su ratio de apalancamiento hasta los 8,4 puntos, 2,1 más que lo que había comunicado la farmacéutica
Ni las conclusiones de la investigación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ni el compromiso de Grifols de cumplir con las peticiones que le ha hecho el regulador perecen calmar al mercado. Los analistas mantienen a la compañía de hemoderivados en cuarentena . Es decir, necesitan evaluar toda la información o esperar a nuevos datos para actualizar totalmente sus estimaciones.
Grifols casi triplicó la remuneración de los miembros su consejo de administración y el personal de alta dirección de la compañía de hemoderivados en 2023, hasta un total de 22,3 millones de euros, antes de la ofensiva de Gotham.