A veces el mercado peca y se olvida de cumplir con el primer mandamiento que dicta su ley, que corresponde a la oferta, la demanda y el precio de los bienes y servicios. En un mercado perfecto, una mayor demanda incrementa el precio hasta que se equilibra. Sin embargo, con las materias primas y su transporte no está ocurriendo esto.
Fue muy sonado el titular que ocupó numerosas portadas durante el verano, con el encallamiento de un barco en el canal de Suez (Egipto), una noticia que se volvió a repetir recientemente, aunque esta vez fue liberado en 15 minutos.
La danesa A.P. Møller-Mærsk, el principal operador mundial de transporte marítimo de mercancías, ganó 6.463 millones de dólares (5.459 millones de euros) netos en el primer semestre de 2021, nueve veces más que un año antes.
El resultado se vio beneficiado por "circunstancias extraordinarias" en forma de un alza continua de los fletes por congestiones y dificultades de suministro creadas por la pandemia, señaló en su informe la dueña de Maersk Line, primera empresa mundial en transporte marítimo de contenedores.
El mundo tiene sed de buques portacontenedores para el lucrativo transporte de mercancías por mar. Un informe de esta semana de la consultora Vessels Value subraya la tríplice burbuja en la que está instalado el comercio marítimo.