Se espera que la reforma legislativa farmacéutica propuesta por la Comisión Europea, la primera del sector en 20 años, tenga «importantes efectos colaterales» en la actividad de I+D a nivel nacional. Y es que España sería el quinto país de la Unión Europea que más perdería en I+D de aprobarse las propuestas del ejecutivo comunitario como consecuencia de una fuga de innovación y producción a EEUU y China.