La Comisión de Transportes de la Unión Europea tiene un importante problema en su propia casa. Si hasta hace unos días, los coches eléctricos serían los únicos que podrían salir de las fábricas de las marcas, ahora se abre un nuevo escenario con los combustibles sintéticos. Ursula von der Leyen ha abierto la puerta al uso de los e-fuels par ano perjudicar a los ciudadanos.