En un esfuerzo por combatir el cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, la ciudad portuaria de Esbjerg en Dinamarca se ha transformado en un referente mundial de sostenibilidad energética. MAN Energy Solutions, una empresa alemana, ha puesto en marcha la bomba de calor más grande del mundo, marcando un hito en la innovación y la tecnología verde.